Aireadores para cubiertas

La mayoría de sistemas de ventilación existentes en el mercado nacen a partir del denominado sistema VENTURI, por el que el aire calentado, va a ocupar las partes más elevadas del edificio.

Ventilación y salida natural de humos, olores, ciertos niveles de humedades o condensaciones, etc. que pueden causarse de una manera más o menos natural en las partes altas y cumbreras de este tipo de edificaciones, son los elementos a tratar en este apartado.

Ventilación estática

La ventilación estática, también definida tradicionalmente como ventilación natural, aprovecha el efecto descrito en la definición del sistema VENTURI y por tanto, por la diferencia creada por la temperatura que calienta de manera natural el aire.

Este hace un recorrido de entrada por las bocanas inferiores y busca su salida natural en las partes más elevadas del edificio a través de los orificios dispuestos al efecto, sin más fuerza que la propia diferencia de temperatura creada.

Estos elementos, por tanto, no disponen de motores mecánicos que fuercen su salida.



Ventilación dinámica

La ventilación dinámica, se basa en los mismos fundamentos que la ventilación estática pero en estos casos la extracción del aire caliente, se ve forzada mediante la adaptación de un motor extractor que ayuda a una salida del aire caliente con mayor rapidez adaptándose a las condiciones que necesita su entorno de actuación, por lo que su eficacia y operatividad no se ven afectadas por las condiciones ambientales exteriores.

Son especialmente aconsejables en entornos interiores donde el polvo, el calor o el vapor demanden una salida efectiva y más rápida de este aire. En muchos casos estos aireadores, van provistos de mandos a distancia, rejillas anti-aves, y reguladores de caudal de salida, según las necesidades de cada instalación